las afueras del evento protestaban con pancartas que decían No al odio, Los inmigrantes también son Estados Unidos y No a la deportación masiva.
Por su parte, varios líderes demócratas y activistas de derechos humanos condenaron las declaraciones de Trump y advirtieron que las acciones anunciadas son inhumanas y violatorias de los derechos humanos. La Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU), el Consejo Nacional de La Raza y la Liga de Ciudadanos Latinoamericanos Unidos (LULAC) anunciaron que tomarán medidas legales para proteger a los inmigrantes y evitar la deportación masiva.
Ante la polarización y la incertidumbre que se vive en Estados Unidos, Trump aseguró que su administración trabajará para unir al país y devolver la grandeza a Estados Unidos. Juntos, haremos grande a Estados Unidos de nuevo, concluyó entre los aplausos de sus seguidores.