Las declaraciones de Trump han generado controversia internacional, con críticas de diversos gobiernos y organizaciones humanitarias que consideran que la respuesta militar es una escalada innecesaria que solo empeorará la situación en Yemen, donde la población civil ya sufre las consecuencias de años de conflicto.
Por su parte, Irán ha negado su apoyo a los rebeldes hutíes y ha condenado los ataques aéreos ordenados por Estados Unidos, calificándolos de violación de la soberanía de Yemen y una amenaza para la paz en la región.
La situación en Yemen sigue siendo extremadamente compleja, con múltiples actores regionales e internacionales involucrados en el conflicto, que ha dejado miles de muertos y una crisis humanitaria sin precedentes. Es importante que se busquen soluciones diplomáticas y se respete el derecho internacional para evitar una escalada de la violencia y proteger a la población civil.